Aunque no es una planta de las difíciles, por desgracia, no resulta fácil mantenerla sana durante largo tiempo.

LUZ

La iluminación debe ser intensa para mantener vivos los colores. Puede darle los rayos directos del sol, pero no es bueno. En este caso la humedad del aire tendría que ser más alta. Cuanto mejor sea la iluminación, tanto mejor será el colorido de sus hojas.

TEMPERATURA

En invierno, mínimo 15º C y en verano, máximo 27º C. Es aconsejable una temperatura constante. Importante que no se produzcan cambios bruscos de temperatura, esta es una de las claves del éxito. Cuidado también con las corrientes de aire.

HUMEDAD

Necesita mucha humedad. Ojo con el aire seco de las calefacciones y estufas. En verano, pulveriza diariamente pero no bajo el sol que podría originar quemaduras por el "efecto lupa".

En invierno, pulveriza semanalmente. Apóyala sobre una capa de guijarros húmedos sin que la base de la maceta toque el agua.

RIEGO

2 ó 3 veces por semana en primavera y verano y cada 4 ó 5 días en invierno con agua tibia. Nunca la dejes secar. 

LIMPIEZA

Mantén las hojas limpias de polvo con un paño húmedo.